Durante la semana del 25 de junio al 1 de julio, RIPESS ha presentado 3 actividades intercontinentales en colaboración con otras entidades u organizaciones, y 10 actividades continentales. Dichas actividades han contado con una representación de África, Europa, Asia y Latino América.
Las actividades intercontinentales, se han centrado en tres temas principales: Género, Juventud y Educación. La primera de ellas, presentada el día 26 de junio en colaboración con Quartiers du Monde y Homenet Asia, comenzó con la ilustración de casos cercanos al contexto de cada una de las ponentes de los diferentes países y continentes, y en ella se plantearon ideas para una construcción colectiva del contexto post-COVID, haciendo siempre hincapié en la necesidad de poner la vida en el centro. Es decir, promover el desarrollo de la ESS con una perspectiva de género para lograr una transformación verdaderamente emancipadora que permita a los grupos de mujeres participar directamente en el proceso de transformación social.
La sesión de Juventud sirvió como ventana para visibilizar el compromiso de los jóvenes con las iniciativas de ESS en diferentes realidades y en diferentes continentes. La actividad fue un punto de encuentro interesante para compartir ejemplos de “buenas prácticas”, y sin duda evidenció el cada vez más alto compromiso de estos colectivos con el medio ambiente, el deseo de conseguir un trabajo que sea significativo para ellxs y su comunidad y la importancia de verse representadxs, no sólo a nivel institucional, sino también entre los colectivos de sus contextos.
En cuanto a la sesión de Educación, contó con la colaboración de la Campaña por un Currículum Global y Socioeco.org, aparte de diferentes miembros de RIPESS que llevan años trabajando en el desarrollo de una educación formal e informal que promueva la Economía Social y Solidaria. Las y los diferentes ponentes sugirieron la necesidad de elaborar un “Currículum Global Educativo” que haga que tanto docentes como alumnos de todo el mundo vean incluidos en sus planes de estudio dichas prácticas, en un contexto educativo que añada una perspectiva de género descolonial y que de alternativas reales al sistema neoliberal.
Por otro lado, las actividades continentales de los miembros de RIPESS fueron especialmente enriquecedoras ya que surgieron de un trabajo enorme de cooperación entre los miembros de las redes y plantearon debates sobre las cuestiones más relevantes de la sociedad internacional. Europa, Asia y América Latina presentaron actividades que reflexionaban entorno a cómo desarrollar estrategias de Economía Social y Solidaria en cada continente en particular, la metodología para elaborar diferentes cambios en la esfera social, y presentaron proyectos concretos continentales que sirvieron como ejemplos de buenas prácticas a nivel mundial, y especialmente como elementos embrionarios de intercooperación. RIPESS Norte América, también siguió la tónica general del resto de continentes, pero focalizó la actividad en la reflexión sobre las posibles respuestas de la ESS al COVID y a la violencia policial racista presente en Estados Unidos.
Todo ello fue una importante contribución al conocimiento, un punto de partida para seguir trabajando en nuevos proyectos, un espacio de intercooperación mundial, un elemento más a favor del cambio social y un ejemplo claro de que no sólo otros mundos son posibles sino de que estos otros mundos ya se están construyendo y cuentan con actores coordinados en todas las partes del mundo.